8J 2019 - Sindicato OTRAS

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I Jornadas  08 junio 2019

Trabajo sexual, derechos laborales y sindicación
I Jornadas

El próximo 08 de junio nos complace invitaros a estas I jornadas sobre trabajo sexual, derechos laborales y sindicación organizadas conjuntamente con Aprosex.
 
Le hemos puesto mucho cariño y trabajo, y os esperamos a todas.
 
Una mesa donde, desde distintas opciones políticas, nos contaran su visión de esta profesión, seguiremos con destacados juristas que nos mostraran una visión de la actual legislación y nos darán unas pautas para entender mejor la forma de actuar de la judicatura.
 
Por la tarde, compañeras trabajadoras debatirán con vosotras, asistentes, la mejor manera de encaminar el futuro.
 
 
No os lo podéis perder.

[Para garantizaros poder asistir, enviar email a otras@sindicatootras.org ]

Cartel de la jornada



Resumen de la jornada

Este pasado sábado 8 de junio, en el marco del Día Internacional de las Trabajadoras Sexuales, el Sindicato OTRAS y la Asociación APROSEX llevamos a cabo las I Jornadas ‘Trabajo sexual, derechos laborales y sindicación’. Ésta es la primera vez que se organiza un evento de semejantes características en el Estado Español, pero esperamos que no sea la única ocasión, ni el único espacio donde trabajadoras sexuales, juristas y representantes políticas puedan dialogar de manera constructiva.
 
Acudimos muy puntuales a primera hora del sábado, no sin antes encontrarnos con cierta dificultad al comenzar la primera mesa de la Jornada que tiene que ver con esta moda de ir acosando a las putas en sus espacios; por fortuna tenemos la experiencia colectiva para lidiar con este tipo de personajes y la cosa no pasó más allá de la mera anécdota.
 
Debido al ambiente de acoso y derribo a toda aquella persona que públicamente defienda los derechos de las trabajadoras sexuales, fue extremadamente complicado lograr la participación de representantes de los partidos políticos que legislan sobre nuestras vidas en la primera mesa de la mañana, la política.
 
Esta mesa contó con la participación de Núria Ayerra, quien fuera procuradora de los Tribunales de Zaragoza y profesora asociada de la Universidad de Zaragoza, en su tiempo de militancia en el PSOE fue Secretaria Regional de Formación e Igualdad del PSOE aragonés, así como concejala de Igualdad de Género, Comercio, Trabajo Autónomo y Desarrollo Rural en el ayuntamiento de Ejea de los Caballeros, Zaragoza.
 
Como representante de Ciudadanos, contamos con la presencia de Sonia Reina, especialista en derecho penal, violencia de género y familia. Se incorporó a la política en 2006 como Consellera de Ciutadans en el distrito de Les Corts.
 
La activista feminista, miembra del Consejo Ciudadano Estatal de Podemos, Inma Ramos, mejor conocida en su trabajo de Ilustradora como P*nitas también hizo el honor de acompañarnos. Junto a ella, también estuvo Marta Cruells, actualmente parte del Gabinete de la Concejalía de Feminismos del Ayuntamiento de Barcelona, quien acudió en representación de Barcelona en Común en sustitución de Laura Pérez, quien, por compromisos con el ayuntamiento en funciones, no pudo asistir.
 
Desafortunadamente este gesto de respeto al mandar a otra representante no lo tuvo Esquerra Republicana de Catalunya que fue incapaz de sustituir a su representante, quien esa mañana se encontraba indispuesta.
 
Núria Ayerra subrayó que es posible jurídicamente regular el ejercicio de la prostitución, sin embargo, no existe la voluntad política para hacerlo. En este mismo sentido, Marta Cruells mencionó que para muchos partidos es más fácil victimizar al colectivo de trabajadoras sexuales que reconocerlas como sujeto de derecho. Por su parte, P*nitas relató la censura y boicot por parte de sectores de Podemos por su apoyo público los derechos de las trabajadoras sexuales.
 
La autora de la tesis doctoral ‘La prostitución como actividad económica por cuenta propia y cuenta ajena’, Nuria Ayerra, señaló que es una actividad “molesta” para las autoridades de diferentes niveles al no regular la actividad y otorgar derechos a quien lo ejerce, actuación que va en contra de todas las recomendaciones de organismos internacionales.
 
Por su parte, Sonia Reina se refirió a la necesidad urgente de contar con las trabajadoras sexuales para poder legislar a favor de sus intereses. De la misma manera relató la manera en que operan las actuaciones judiciales y policiales en clubes, donde se levantan sanciones contra los derechos de las trabajadoras, sin embargo, terminan archivadas por no poderse demostrar relaciones laborales y sin embargo, y se acaban convirtiendo en redadas de extranjería.
 
En el turno de preguntas, las integrantes de la mesa tomaron nota sobre las inquietudes que las trabajadoras sexuales presentes en el público les transmitían, como acabar ya con las campañas gubernamentales que desinforman al mezclar trata y prostitución.
 
La conclusión generalizada por parte de asistentes y ponentes fue que las trabajadoras sexuales deben ser tomadas en cuenta cuando se pretenda legislar y las representantes políticas deben ser valientes para adaptar la legalidad de acuerdo a la realidad y no pretender cambiar esa realidad desde la imposición.
 
Después de un pequeño intermedio para estirar las piernas, continuamos con la siguiente mesa, que agrupaba a expertos juristas no sólo en el ámbito laboral, sino también desde la perspectiva pro-derechos del trabajo sexual.
 
Avelina Garza, abogada laboralista en ejercicio desde hace más de 20 años, y desde toda su experiencia en materia legal, reseñó todos los vericuetos legales que tanto dueños de clubes como autoridades municipales utilizan tanto para no reconocer la relación laboral con sus trabajadoras, como para seguir otorgando licencias de funcionamiento, respectivamente.
 
Encarna Guillén, abogada de oficio de violencia de género, miembra del Ilustre Colegio de Abogados de Murcia desde el 2004.y abogada del Comité de Apoyo a las Trabajadoras del Sexo (CATS, centró su intervención en distinguir entre trata, tráfico y prostitución como lo marca la ley, así como la situación legal del trabajo sexual tanto en el Código Penal como en la Ley de Seguridad Ciudadana (Ley Mordaza).
 
Desde su experiencia sobre el terreno trabajando todos los días con compañeras que ejercen en clubes y la vía pública nos hizo un retrato objetivo y realista de las incoherencias legales, que sancionan a las trabajadoras sexuales gracias a conceptos tan amplios como “indecente” u “obsceno”.
También denunció la falta de recursos humanos y materiales para enfrentar la trata de manera efectiva por parte de las instituciones.
 
Desde OTRAS y APROSEX, al momento de diseñar las Jornadas, intentamos buscar personas que pudieran comunicar muy bien, que supieran explicarse con un lenguaje no demasiado complicado y que supieran perfectamente de lo que estaban hablando. Y ya que esta mesa iba de cuestiones legales, quién mejor que comentar la ya cansinamente famosa sentencia de la Audiencia Nacional sobre el sindicato, que el abogado que llevó la causa, Miquel Serra. Este Licenciado en Derecho por la UB en 1994 y especializado en derecho sindical ha tenido la valentía de defender al sindicato OTRAS ante la Audiencia Nacional donde otres, no la tuvieron. Afortunadamente, les valientes se terminan encontrando.
 
Su explicación del caso no pudo ser más didáctica y sencilla de entender (hasta una radfem o uno de vox, lo habrían hecho). Explicando los artículos constitucionales que han servido de base para la constitución del sindicato OTRAS, el procedimiento que se siguió en la Audiencia Nacional, así como la explicación igual de clara y sencilla de la sentencia y la actual situación legal de OTRAS.
 
Como tuvo a bien explicarlo el letrado, lo que sucedió en la Audiencia Nacional fue la desestimación del recurso de disolución del sindicato, con los estatutos impugnados con un recurso en el Tribunal Supremo.
 
Desafortunadamente, y como muchas veces sucede en estos casos, nos habría gustado alargar mucho más el tiempo de la mesa. Pensamos que tener nociones mínimas de derecho para operar en la vida es como tenerlas de matemáticas, y consideramos muy importante que como trabajadoras de un sector en el que hay diversas legislaciones dedicadas a reprimir y controlar a quien lo realiza, sepamos cómo nos afecta, como protegernos y, al mismo tiempo, estar al pendiente de cualquier cambio legislativo que entre en vigor relacionado con nuestro trabajo.
 
Después de este arranque tan potente y a pesar de haber querido alargar, había que hacer una pausa para recargar energías y también compartir mesa con compañeras a las que, por el ritmo tan desenfrenado que llevamos todas, nos cuesta ver. Y qué mejor que celebrar los reencuentros que con la exquisita gastronomía vasca del barrio.
 
Para rematar las jornadas, en la mesa de la tarde quedaba la guinda del pastel: Las trabajadoras sexuales en primera persona. Una mesa donde estuvieron reunidas compañeras con realidades tan diversas, como la vida misma. La única limitación que existía en esta mesa (y en todas) era la temporal, es por eso que aprovechando la libertad de no tener límites, las compañeras pudieron contar en primera persona sus experiencias y reclamos en el sector, dentro del trabajo sexual, en el que se han especializado más.
 
Nos acompañaron nuestres compas, Xavi Tallón, quien como trabajador sexual dio cuenta de la invisibilidad de los varones que ejercen trabajo sexual, así como la reterritorialización que ha hecho el sistema capitalista del llamado colectivo LGBT, al que ha vaciado de todo contenido transformador de la sociedad y lo ha convertido en un target mercadotécnico más, mientras que, por otro lado, muchas identidades que no entran dentro de lo que es el perfecto ciudadano gay, quedan fuera, consecuencia de las estructuras racistas, clasistas y sexistas que se han replicado en parte del movimiento LGBT.
 
Desde Galicia nos acompañó Lucía Fernández, mejor conocida como “LuciFer” quien ha trabajado sobre todo para terceras personas, tanto en pisos como en agencias. Como ha comentado en otras ocasiones, es estudiante de Derecho “a ratos” y como militante de un sindicato desde los 15 años su intervención fue una narración muy realista del trabajo en los pisos de “paseillo”, apuntalándola con preceptos de derecho. Señaló los abusos laborales a los que nos enfrentamos las trabajadoras sexuales que trabajamos por cuenta ajena, que cedemos un porcentaje grande de cada servicio a cambio de condiciones que se prometen y muchísimas veces no se cumplen amparándose en la inexistente regulación laboral de nuestro trabajo.
 
Cuando se habla sobre prostitución en los medios y la sociedad en general, la primera imagen que viene a la mente son mujeres de pie en calles y carreteras, esas que en algún momento han llegado a ser denominadas por algún conseller catalán como “peligro para la seguridad vial”. Compañeras de las que se habla mucho y con las que se habla poco, pero cuando pueden hablar, lo hacen alto y claro. Como Ninfa, compañera trans, migrante, miembra fundadora de OTRAS y parte activa de la Asociación Feminista de Trabajadoras Sexuales, AFEMTRAS, con amplia experiencia en el trabajo sexual que capta a los clientes en la calle, es el más hipervigilado y castigado por parte de las instituciones.
 
En los tiempos en que se ejercía en la Casa de Campo madrileña, “los gloriosos tiempos”, como dijo Ninfa, la mayor preocupación de quienes ejercían en ese punto de la Capital era la irregularidad en su situación migratoria, pues ellas sabían que la prostitución no era ilegal. Igualmente debido a esta presión, muchas mujeres en situación irregular sobre todo y otras que no querían problemas con la policía, decidieron ir a ejercer a las afueras, al polígono de Marconi-Villaverde. En realidad, las redadas de extranjería siempre fueron un pretexto para luchar contra la actividad.
 
Como mujer trans, denunció la falta de oportunidades laborales, muchas veces derivada de la imposibilidad de cambiar nuestros documentos sin tener nacionalidad española. Igualmente, la ley trans actual en España también pone grandes impedimentos patologizantes para poder adecuar los documentos legales a la realidad de las mujeres trans.
 
En su intervención, Kali Sudhra, mujer migrante, performer, actriz porno y miembra fundadora de OTRAS, nos hizo partícipes de su experiencia dentro de la industria del porno y de las dinámicas de falta de derechos que se dan en su interior, a pesar de ser una industria completamente legal. También habló de la existencia de lo que se denomina como “whorearchy”, que se refiere a las jerarquías que existen dentro del porno y el trabajo sexual basadas en la raza, el género y la clase.
 
Algunas productoras que se dicen “feministas o éticas”, continuó, muchas veces incumplen los acuerdos mínimos y exigen que lxs performers paguen los análisis médicos requeridos para actuar. Por otro lado, tampoco permiten muchas veces que los performers se pongan en contacto entre ellos y así poder saber con quién están trabajando. De la misma manera, en repetidas ocasiones las productoras no especifican si va a ser un rodaje de unas pocas horas o de todo el día (todo por el mismo “fee” o tarifa). También señaló el poco o nulo control de su propia imagen, pues las productoras nunca dicen dónde se va a distribuir y denunció la incoherencia de no recibir regalías por esas imágenes tan perdurables en el tiempo en comparación de las ganancias que generan.
 
Desde Sevilla nos acompañó MariJose Barrera, cofundadoras del Colectivo de Prostitutas de esa ciudad, mujer comprometida con los derechos sociales y, como ella misma dijo, abolicionista en el pasado. Éste gran cambio en su forma de pensar ocurrió cuando se dio cuenta que el trabajo sexual no iba a desaparecer. De hecho, la discusión que deberíamos estar teniendo, según ella, no es abolición sí o no, sino si seguimos ejerciendo este trabajo con derechos o en la clandestinidad.
 
Denunció que en Sevilla se habían creado empleos de “mediadoras” por parte del Ayuntamiento pensados para que las trabajadoras sexuales que ya no quisieran ejercer, tuvieran una salida profesional en un campo que ellas conocían. Sin embargo, estos empleos han sido cooptados por el amiguismo político que campa por toda la geografía española. También nos explicó la forma en que las trabajadoras sexuales y los taxistas fueron recorriendo club por club recogiendo las direcciones, ya que el ayuntamiento sevillano, referente en cuanto al abolicionismo, curiosamente no tenía las ubicaciones de los clubes a los cuales otorgó licencia de funcionamiento.
 
La intervención de Marijose fue muy potente, como nos tiene acostumbradas, pero en una mesa donde las potencias eran muy grandes, no podría faltar una mujer que, por su lucha, ha logrado sentar un precedente histórico para las trabajadoras sexuales en particular, pero para todas las trabajadoras en el Estado Español.
 
Evelyn Rochel, “la puta rebelde”, como la ha bautizado algún medio. Afiliada de OTRAS, trabajadora de club de alterne y guerrera colombiana, nos compartió su experiencia en este sector del que también se dicen cosas como que “los clubes son campos de concentración” (si lo fueran, ninguna podría salir a dar charlas) cuando la realidad es diferente, aunque las condiciones laborales sean cercanas a la esclavitud, como bien señaló nuestra compañera.
 
Evelyn relató que gracias a la nula protección laboral que tenemos como trabajadoras sexuales, los dueños de los clubes se creen con la potestad de “crear leyes” internas, sin posibilidad de reclamar y cuando se hace, ya quedan señaladas por el empresario, además de ser objeto de una intensificación de las malas condiciones laborales imperantes. “Negarme la relación laboral con el empresario significa perpetuar la esclavitud, yo quiero ejercer este trabajo, pero lo quiero hacer en buenas condiciones”, señaló Evelyn. Cuestionó también los discursos de quienes victimizan a las trabajadoras sexuales diciendo que todas las mujeres que trabajan en clubes son víctimas de trata. Ella en sus más de 15 años de experiencia no se ha encontrado a ninguna mujer en esta situación. Agregó que en Cataluña sí se ofrecen “contratos de trabajo”, pero sin derecho a nada, ni siquiera a un salario, por lo que son papel mojado que vuelve a beneficiar al empresariado.
 
Por último, pero no menos importante, nuestra Secretaria General, Conxa Borrell destacó la gran cantidad de público asistente, pues eso demuestra que hay un genuino interés de parte del gran público de saber lo que nosotras queremos decir y las necesidades que tenemos como trabajadoras y como mujeres.  Haciendo un repaso histórico relativamente reciente, Conxa mencionó que, durante la pandemia de VIH, quienes primero exigieron el uso del preservativo y, por lo tanto, lucharon por detener esta enfermedad, fueron las trabajadoras sexuales.
 
Analizando los últimos meses desde que surgió el Sindicato OTRAS, Conxa hizo un llamamiento a revisarse los privilegios, como han hecho muchas mujeres que alguna vez han tenido una posición de “privilegio”, para no pasar por encima de otra mujer con una situación más desfavorecida con tal de seguir perpetuando las estructuras que nos oprimen como mujeres primero y como trabajadoras sexuales después.
 
Durante el turno de preguntas escuchamos por parte de las asistentes muchas expresiones de apoyo -como la que se demostró este pasado 8 de marzo en Barcelona por parte de la Comisión de Migración-, así como preguntas y dudas por parte de las asistentes deseosas de seguir aprendiendo de la mano de las trabajadoras sexuales.
 
Así, a las 7 de la tarde (una hora más tarde de lo previsto), dimos por concluida una Jornada apasionante, empoderadora y sin lugar a dudas, histórica por donde se le vea.

Imágenes de un gran día
Created by Jota & Violetta
Sindicato de Trabajadoras Sexuales
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